El diario El Comercio ha informado sobre la creciente actividad proselitista de Antauro Humala y Martín Vizcarra, a pesar de los impedimentos legales que les impiden postular a la presidencia en 2026. Todo parece indicar que ambos buscan mantener vigencia política y generar un posible endose de votos, aunque sus estrategias han sido calificadas como poco transparentes.

El caso de Martín Vizcarra

Vizcarra enfrenta dos inhabilitaciones que le impiden ejercer cualquier cargo público. Sin embargo, ha incrementado su presencia en el interior del país a través de su partido, Perú Primero. Alejandro Salas, exministro de Pedro Castillo y miembro de Perú Primero, ha declarado que esperan una resolución favorable del Tribunal Constitucional. En caso contrario, podrían recurrir a instancias supranacionales.

No obstante, las proyecciones no son alentadoras. Algunas figuras clave han abandonado el partido, como el excongresista Alberto Oliva, quien migró a Somos Perú en 2024. Este panorama pone en duda la viabilidad de la estrategia de Vizcarra y su impacto electoral.

Antauro Humala y la ilegalidad de su partido

Por su parte, Antauro Humala se enfrenta a la ratificación de la ilegalidad de su partido por parte de la Corte Suprema. Según el especialista electoral José Manuel Villalobos, esto le impide postular a la presidencia, ya que la ley exige estar afiliado a un partido con inscripción vigente antes de julio de 2024. Tampoco podría postular al Congreso, a menos que haya renunciado a su partido antes de diciembre de 2024, lo cual no ocurrió.

A pesar de ello, Humala ha buscado alianzas con partidos como Juntos por el Perú, liderado por Roberto Sánchez, y ha mantenido reuniones con Fe, el partido de Álvaro Paz de la Barra. La estrategia de Humala parece orientada a forzar una candidatura congresal o a influir en las elecciones mediante un discurso radical.

Análisis de Enzo Elguera: Riesgos y consecuencias

El analista político y CEO de Imasolu, Enzo Elguera, en entrevista para El Comercio, ha advertido que la situación de impedimento de ambos personajes podría generar confusión entre sus votantes. Según Elguera, si su electorado percibe que no podrán postular, podría migrar hacia opciones con perfiles similares o afines ideológicamente. Sin embargo, el panorama fragmentado con numerosos partidos y alianzas podría diluir ese respaldo sin beneficiar a ningún actor en particular.

Asimismo, Elguera considera que una alianza con Vizcarra o Humala representaría un riesgo significativo para los partidos políticos, sobre todo en primera vuelta, debido a los cuestionamientos que arrastran ambos personajes.

El escenario electoral de 2026 se perfila complejo, con estrategias que desafían los límites legales y políticos en la búsqueda de influencia y respaldo popular.